La oposición pidió pasar a un cuarto intermedio por los incidentes en las cercanías del Congreso. El jefe del bloque Pro, Nicolás Massot, y el kirchnerista Daniel Filmus tuvieron que ser separados.
Mientras transcurría el debate del proyecto, legisladores de la oposición más dura comenzaron a pedir a los gritos que se pasara a un cuarto intermedio por los incidentes en las afueras del Congreso.
Se encontraba en uso de la palabra el diputado radical Luis Pastori y presidía la sesión en ese momento Luis Petri, cuando miembros del Frente para la Victoria-PJ, el Movimiento Evita y la izquierda se acercaron masivamente al estrado.
Petri no dejaba de pedir silencio, pero fue en vano. Volvió entonces a su sillón el presidente de la Cámara, Emilio Monzó, quien pedía “ordenar la sesión” y que hasta que eso pasara no le daría la palabra al jefe del bloque K, Agustín Rossi.
Sin poder lograr la atención, varios se pusieron a gritar y se los vio muy enérgicamente en el medio del recinto a Nicolás del Caño, Victoria Donda, Leonardo Grosso, Lucila De Ponti y Araceli Ferreyra. “¿Me deja conducir la sesión? ¿Me deja conducir la sesión? Ya le voy a dar la palabra a Rossi”, trataba de calmar Monzó.
Mientras tanto el kirchnerista Juan Cabandié se acercaba con reclamos al presidente del bloque Pro, Nicolás Massot. Se sumó después a la discusión Daniel Filmus y el clima terminó de calentarse cuando ambos casi se van a los golpes de puño, y tuvieron que ser separados por el resto de sus compañeros. Pero en esa batahola hubo más empujones y gritos.
Monzó abandonó su sillón visiblemente molesto. Minutos antes la kirchnerista Laura Alonso se había subido al estrado para mostrarle un video de lo que pasaba en la calle, donde efectivos de la Policía de la Ciudad avanzaron con carros hidrantes y gases lacrimógenos contra los manifestantes. Se levantó para ir a calmar las aguas y más tarde se fundió en un abrazo con Julio Solanas (FpV-PJ), quien casi se va a las manos con Fernando Asencio, del flamante interbloque Red por Argentina.
Minutos después se reinició la sesión y el titular de la Cámara baja informó que “en media hora” vendría el jefe del operativo de seguridad montado en los alrededores del Parlamento, Marcelo D’Alessandro, secretario de Seguridad porteño. Finalmente, pasadas las 16 se pasó a otro cuarto intermedio y los jefes de bloque se fueron a reunir en el despacho de Monzó con el funcionario.
En lo que duró la espera de D’Alessandro, se sucedieron en el recinto distintos discursos de la oposición, pidiendo que directamente se dejara de sesionar. El primero en hablar fue Rossi, que sostuvo: “Nosotros no estamos de acuerdo con continuar la sesión, porque es una irresponsabilidad que mientras afuera se está reprimiendo a ciudadanos argentinos que se están manifestando, nosotros hagamos oídos sordos sin mirar lo que está sucediendo afuera”./Parlamentario