Una resolución de la Nación le permitirá a esta joya de la gastronomía sanjuanina distinguirse de otros productos y posicionarse a nivel nacional y mundial.
Hoy se publicó en el Boletín Oficial de la Nación la Resolución Nº 14/2018, que establece el inicio de vigencia de la Denominación de Origen (DO) del Dulce de Membrillo Rubio de San Juan. De esta forma se oficializan los distintivos específicos que le permitirán a esta “joya de la gastronomía sanjuanina” distinguirse de otros productos y lo posicionarán a nivel nacional y mundial.
La gestión para la obtención de esta certificación fue realizada por la Asociación Civil “Consejo de la Denominación de Origen del Dulce de Membrillo Rubio de San Juan” y contó con el apoyo del Gobierno provincial a través del Ministerio de Producción y Desarrollo Económico.
En el año 2016, la Comisión Nacional Asesora de Indicaciones Geográficas y Denominaciones de Origen de Productos Agrícolas y Alimentarios aprobó la (DO) de este emblemático producto local, mediante la conformidad de un riguroso proceso de certificación controlado por la autoridad regulatoria pertinente.
Acerca del dulce de membrillo rubio de San Juan
El color claro que caracteriza a este delicioso y nutritivo alimento es resultado de:
Membrillos sanjuaninos, que presentan características distintivas de aroma, sabor, olor (derivadas del conjunto de factores agroecológicos de los valles donde se cultivan). La cantidad de pectina natural, justamente, hace que no se requieran espesantes ni gelificantes.
Se utilizan básicamente las variedades existentes en San Juan: Criollo y Champion.
Un cuidado proceso de selección de frutos frescos, sanos, sin defectos por plagas o golpes.
Y fundamentalmente, el cuidado proceso de elaboración, a escala artesanal o empresarial, que evita la oxidación. Por ello, no hay que sobrecocinarlo: justamente la tipicidad del producto está –además de la materia prima- en los saberes implicados en el proceso de elaboración.