El exdueño de la financiera SGI afirmó en la Justicia que el periodista y el sindicalista le «llenaron la cabeza» y sostuvo que pasaron la entrevista en ‘Periodismo para Todos’ contra su voluntad.
Federico Elaskar, ex dueño de la financiera SGI, confesó que incriminó al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en una causa por lavado de dinero, porque el periodista del Grupo Clarín Jorge Lanata y el líder del sindicato gastronómico, Luis Barrionuevo, le «llenaron la cabeza».
«A mí, Luis Barrionuevo y Jorge Lanata me llenaron la cabeza diciéndome que Lázaro Báez me quería matar. Y como yo creía que Báez me debía cuatro millones de dólares, pensé que era cierto que me quería matar. Yo tenía 25 años y acepté decir en televisión lo que ellos me dijeron que dijera. Fue una operación política contra el gobierno de Cristina, porque querían instalar que el dinero era del kirchnerismo», sostuvo.
De acuerdo a una nota de Página 12 que tuvo acceso a la declaración, Elaskar aseguró que mintió por miedo a Lázaro Baez, quien le debía 4 millones de dólares. Lanata y Barrionuevo se aprovecharon de ese miedo: no sólo le dijeron que el empresario quería matarlo, sino que pasaron al aire su declaración, pese a que Elaskar le pidió que no lo hagan.
“Ellos me llenaron la cabeza diciéndome que Báez me quería matar y por eso acepté decir lo que me proponían en la televisión. Pero enseguida me dí cuenta y les exigí que no pasaran al aire la entrevista. Pero me engañaron y ya no contestaron más el teléfono. Fue una operación política contra el gobierno anterior, instalando que era dinero del kirchnerismo. Era mentira. Y eso sigue hasta ahora», dijo.
La deuda con el empresario se dio luego de que en 2010 se produjo la oferta de compra de SGI por parte de Helvetic que tenía a Báez detrás. El monto que el constructor debía pagar 9 millones de dólares, de los cuales pagaron la mitad y quedaron debiendo la otra parte. La desesperación de Elaskar fue la usada por los medios para involucrar al kirchnerismo.
El financista dio su opinión acerca del futuro de la causa judicial: “Esta es una causa contra la ex presidenta. El juez Sebastián Casanello dijo que ella no tiene relación con el lavado de dinero ni con la plata de SGI, pero está todo armado y la Sala II de la Cámara Federal la va a cocinar”, publica Diario Registrado.