El aparato de altísima resolución de Salud Pública detecta el ADN del virus y permite determinar la infección de manera precoz y así prevenir el cáncer de cuello de útero.
Los profesionales de laboratorio del Centro de Adiestramiento René Favaloro (CARF) tienen a su cargo la tarea operativa de validar y cargar los resultados en el Sistema de Información y Tamizaje (SITAM).
El personal técnico de laboratorio está conformado por la jefa de Laboratorio Lic. Sonia Cívico y la Dra. Paola Avella, quienes trabajan articuladamente con el Área de Salud Sexual del Ministerio de Salud Pública, a cargo de la Dra. Claudia Noriega.
La Lic. Sonia Cívico explicó: “Somos dos las profesionales encargados del aparato, la Dra. Avella y yo. Además hay una técnica de laboratorio que nos ayuda en esta parte operativa tan importante de validar resultados, cargar resultados al SITAM y a partir de ahí enviarlos para que la mujer reciba su resultado en el puesto sanitario donde se haya tomado la muestra. Además hay dos técnicas de laboratorio que colaboran en la parte administrativa”.
“Yo realizo el control de los insumos para que no se desaprovechen. Hay que estudiar la cantidad de pacientes que tiene cada centro de salud para que no se desperdicien las autotomas. Tienen un vencimiento largo, pueden estar hasta 6 meses una vez tomadas. Pero el tema es que vivimos en San Juan, hace mucho calor y los puestos sanitarios se cierran a mediodía, por lo que requiere de una logística especial. Antes de comenzar se capacitó a los tres niveles: a los profesionales médicos, a los paramédicos, asistentes sociales, psicólogos, agentes sanitarios, es decir, los que ofrecen el test y también se capacitó al personal administrativo”, añadió.
Y agregó: “Por ejemplo en el CARF a la mujer se le explica, se la acompaña y se le recibe la muestra. En los CAPS y los CIC hacen lo mismo, explican, entregan, la señora va al baño, lo toma y vuelve. Luego se trae de vuelta al CARF y aquí alguien lo recepciona. Esa persona lo carga al SITAM, a la ficha, que es una ficha con los datos de la señora, y además va un papelito extra que dice si quieren o no recibir la comunicación telefónica, vía mensaje de texto, diciendo que ya está el resultado. Este test es muy similar al VIH en cuanto a confidencialidad”.
“Si ese CIC o CAPS tiene un ginecólogo y la mujer decide que él tome la muestra, lo envía en otro recipiente que es diferente para la toma dirigida, saca directamente muestra de cuello de útero, igual que si fuera un Pap y después lo manda. Entonces el método depende del lugar, si hay profesionales, o lo que prefiera la mujer”, señaló.
Asimismo la profesional describió cómo continúa el proceso: “Una vez que está cargado, en el Ministerio, la Dra. Noriega y Mirta Armesto, envían el mensaje telefónico a la mujer que aceptó recibirlo. Y cuando lo recibió se aproxima por el centro de salud y se le entrega el resultado si es negativo. Si es positivo, se sigue un protocolo: se le solicita turno, si no hay ginecólogo en ese lugar, se le solicita en el CARF o en el Hospital Rawson. Se la guía, de acuerdo al resultado, en lo que tiene que hacer. Si le dio negativo vuelve en 5 años y se hace nuevamente el test. No hace falta más, no hace falta hacerse el Pap anual, nada por el estilo”.
“Este equipo tiene de maravilloso que no solamente dice “tiene VPH” sino qué tipo de VPH tiene, esto es genotipificación. Y dependiendo de eso es el procedimiento que uno sigue a continuación. Es muy seguro, los datos son clarísimos. Tiene un control interno que es una proteína humana, la betaglobina, que la tienen todas las células del organismo. Entonces, a la vez que me está buscando el VPH, ve si está la célula humana ahí, lo que indica si la muestra es válida o no. Porque quizá una mujer se tomó una muestra insuficiente, y le da negativo. Entonces, el equipo me dice no, no es que sea negativo, es que no tiene célula suficiente”, contó Cívico.
Y concluyó: “Desde que se puso en funcionamiento en julio hemos tomado aproximadamente 2 mil muestras, más de lo que creíamos en esta primera etapa. A fin de mes abarcaríamos todo el departamento Sarmiento y la zona V estaría cubierta. En febrero empezaríamos con las otras zonas sanitarias. En San Juan hay un porcentaje de un 19% de test de VPH positivo, pero que tenga VPH no significa que tenga o va a tener cáncer. Al contrario, significa que puede evitar tener un cáncer. Es una gran posibilidad, es trabajar en la prevención. Encontrar de antemano el virus que puede llevar a una mujer a tener cáncer es grandioso”.