La droga pertenece a las inmunoterapias que ayudan a retrasar el crecimiento de las células cancerosas.
Especialistas aseguran que las personas que padecen cáncer de pulmón actualmente “tienen una sobrevida cada vez mayor gracias a la inmunoterapia”, que permite eliminar los signos de la enfermedad en el 80% de los casos gracias al uso de pembrolizumab.
El español Ignacio Gil Bazo, especialista en Oncología, participó en la Argentina de la Conferencia “Dra. Miryam Losanovscky” sobre Cáncer de Pulmón, donde afirmó: «El incuestionable impacto clínico de la inmunoterapia en pacientes con cáncer nos está obligando a reevaluar la sobrevida, ya que algunas personas enfermas que antes no vivían más de dos años hoy ya están con cuatro y más años de vida luego del diagnóstico».
El doctor, quien dirige el Departamento de Oncología de la Universidad de Navarra en Pamplona, España, precisó que se trata de pacientes con «cáncer de pulmón de células no pequeñas» (CPCNP) que fueron tratados con pembrolizumab. Este medicamento pertenece a las inmunoterapias, ya que colabora con el sistema inmunológico en el retraso del crecimiento de las celulares cancerosas.
En nuestro país, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) ya aprobó el pembrolizumab para su uso en algunas indicaciones de cáncer de pulmón, así como en el tratamiento de «melanoma irresecable o metastásico, cáncer urotelial, cervicouterino y gástrico».
Actualmente, “el CPCNP representa el 80% de los casos diagnosticados tanto en España como en Argentina, por lo que los datos son buenos. En muchos de los casos se trata de pacientes que sólo recibieron dos años de tratamiento con inmunoterapia», describió Gil Bazo. Y apuntó también que están observando «respuestas patológicas completas, es decir, ausencia de signos de cáncer, en el 80% de los pacientes con esa enfermedad, y respuestas patológicas mayores o muy importantes en más del 90%».
En la Argentina, según datos de la Organización Mundial de la Salud, es el cuarto tipo de cáncer de mayor incidencia, con 11.595 casos diagnosticados cada año. Y es el que tiene mayor mortalidad, produciendo 10.600 muertes anuales.
