Desde Puerto Madero, los dirigentes de Primera cuestionaron a Tapia por «arrogarse facultades que no tiene» a partir del «caso Tigre» y utilizar argumentos «falsos» para modificar reglamentos de su competencia.
En medio de internas que encolumnan a dirigentes en torno al cumplimiento del reglamento o a amoldarlo, la Superliga unificó su postura para enviar una carta cargada de cuestionamientos dirigida al presidente de la AFA, Claudio Tapia, y que lleva la firma de Daniel Angelici-presidente de Boca y vice de Chiqui- y Rodolfo D’Onofrio, titular de River y opositor a la gestión de la Asociación del Fútbol Argentino, entre otros.
“El presidente de la AFA sostiene que tiene competencia para reglamentar los requisitos exigidos a los clubes nacionales para participar de los torneos organizados por la Conmebol. Sin embargo dicha afirmación es FALSA. (…) La Superliga no solo tiene autonomía para dictar sus propios reglamentos, sino que la AFA le ha reconocido, de manera expresa e irrestricta, la facultad exclusiva de determinar los criterios de clasificación a las copas internacionales”, indica un párrafo fuerte que centra sus argumentos en los artículos 81, incisos 2 y 3 del estatuto de AFA.
La carta es una respuesta a la misiva que salió de Viamonte 1366 con destino Tigre -y copia electrónica a la Superliga- en la que autorizaba al club de Victoria a jugar las Copas Sudamericana y Libertadores, según su posición en la tabla general del torneo que pasó y su condición de finalista de la actual Copa, le gane o no el partido a Boca.
“Dicha decisión del presidente de la AFA se inmiscuye en cuestiones que resultan competencia exclusiva de la Superliga, como es la determinación de los criterios de clasificación de los clubes a las copas internacionales. Ello en virtud de lo acordado de manera expresa y suscripto entre AFA y Superliga en el Convenio de Coordinación en julio de 2017”, remarcan los dirigentes -además de Angelici y D’onofrio- otros que además forman parte del comité ejecutivo de la Asociación, como Pascual Caiella.
En Puerto Madero entendieron que la AFA se extralimitó en un momento en que la Conmebol disponía que para la siguiente edición de los torneos que organiza -las copas continentales- no podrían jugar aquellos equipos que no pertenezcan a la Primera División en sus ligas. Tigre y otros equipos brasileños, se quedaban afuera.
Si bien Conmebol retrocedió en su decisión, la Superliga había solicitado a la AFA que interceda en defensa de sus intereses. Pero la jugada de Viamonte -traccionar en Asunción por los clubes argentinos y luego disponiendo la clasificación de Tigre- fue entendida en Puerto Madero como una ofensa.
“Resulta extraño que, pese a todo ello, y arrogándose facultades que no tiene, el presidente de la AFA pretenda contrariar lo aprobado por los clubes de Primera División en el seno del Comité Ejecutivo de la Superliga en pleno uso de sus competencias, violando derechos adquiridos y, bajo el pretexto de proteger a un club, perjudique a otros”, dice uno de los párrafos más fuertes de las cinco páginas enviadas a Tapia.