El lugar no tenía seguridad privada, no estaba habilitado como local bailable y excedía la capacidad máxima.
Un conocido bar capitalino fue clausurado este jueves por la noche luego de que la Policía diera con una fiesta clandestina que se desarrollaba puertas adentro. El bar esta ubicado en calle Entre Ríos, entre Laprida y Rivadavia. Allí, más de 200 personas asistían a la fiesta secreta cuando se realizó la clausura.
Según informaron fuentes oficiales, la fiesta se desarrollaba periódicamente en este bar. También, detallaron que el cierre fue por «no contar con las habilitaciones pertinentes para un espacio bailable».
“Estamos obligados a ser rigurosos con los controles porque está en juego la vida de la personas», dijo el secretario de Seguridad, Carlos Munisaga, al ser consultado por el operativo.