Hasta este domingo, más 21.000 personas habían perdido la vida y unas 530.000 se habían contagiado, aunque las autoridades reconocen que los números reales podrían ser varias veces mayores.
Y a medida que la pandemia se ensaña con la nación más poderosa de la Tierra muchos se preguntan si el gobierno de EE.UU. pudo haber hecho algo para evitarlo o, al menos, para reducir el impacto.
Este fin de semana, el diario estadounidense The New York Times publicó un artículo en el que aseguraba que varios expertos en salud habían sugerido a la Casa Blanca tomar medidas e implementar una mitigación agresiva desde fines de febrero, pero no fueron tomadas en cuenta.
Una declaración este domingo de la principal autoridades en enfermedades infecciones del país volvió a traer el tema.
Si la situación es crítica en la mayor parte de EE.UU., en el estado de Nuevo York es peor.
No obstante, durante una sesión informativa el domingo, el gobernador Andrew Cuomo dijo que quiere que su estado, que ha sido el epicentro del brote, se abra «lo antes posible».
Pero el gobernador fue cauteloso y dijo que tenía que haber un enfoque coordinado entre los estados vecinos, más disponibilidad de pruebas y fondos federales adicionales.
Cuomo también se mostró escéptico ante cualquier pronóstico.
«Cada proyección informada de expertos, por cierto, no resultó correcta».
«He dicho desde el primer día: todas estas predicciones del tipo ´abriremos negocios en mayo, haremos esto en mayo, haremos esto en junio`… creo que todo es prematuro. No creo que nadie pueda tomar una decisión informada correctamente ahora», sostuvo.
Fuente: domingo 12 de abril de 2020 – (BBC Mundo)