Varios días atrás, el ministro Nicolás Trotta afirmaba que los chicos retornarían a las aulas «cuando esté la vacuna» contra el coronavirus. Luego, el presidente Alberto Fernández relativizaba esos dichos al señalarlo como «escenario ideal».
Lo cierto es que para ningún estamento del Gobierno Nacional aparece el reinicio de las clases como escenario cercano, mucho menos con el invierno que se avecina; es decir, cuando las condiciones para la propagación del COVI-19 son ‘ideales’.
La opción que por ahora se maneja es, como también adelantó el jefe de Estado, un reinicio del ciclo lectivo bajo circunstancias inéditas en la Argentina y en el mundo.
La idea que se maneja en el Ministro de Educación de la Nación es un eventual retorno a las aulas para después de las usuales vacaciones de invierno y bajo condiciones excepcionales. «Para agosto o septiembre», indicó Trotta en declaraciones por La Red.
«Hoy imaginamos una vuelta como Europa, escalonada, no con todos los estudiantes simultáneamente», porque «volver con los estudiantes de los cuatro niveles educativos, desde el inicial hasta el superior, es movilizar 15 millones de personas todos los días», explicó el ministro.
Para evitar tal movilización y aglomaración de personas, en el gobierno se piensa en que, «por ejemplo, iría la mitad de séptimo grado un día y al otro día la otra mitad, para que no haya congestión en los ingresos ni en las aulas. La ventaja es que podemos ver lo que ocurra en otros lugares primero», precisó Trotta.
Luego de afirmar que «cada medida hay que analizarla», Trotta señaló que «si volvemos es porque minimizamos el riesgo del contagio. No va a desaparecer. Y ahí veremos cómo responde la vuelta en los colegios europeos y el impacto epidemiológico que tienen ahí».