No hubo goles en la Bombonera, y en un encuentro algo aburrido, el «Xeneize» selló el pase a la próxima instancia del certamen, a una fecha del cierre de la fase de grupos.
En su primer encuentro en la Bombonera desde el reinicio de la Copa Libertadores, Boca igualó sin goles ante Libertad, y logró así la clasificación a los octavos de final del certamen a falta de una jornada para el cierre de la fase de grupos.
Como se preveía en la previa, el entrenador Miguel Ángel Russo dispuso tres modificaciones respecto al equipo que venció sobre la hora a Independiente Medellín la semana próxima: uno obligado (la salida de Gonzalo Maroni por una lesión y el ingreso de Agustín Obando) y dos decisiones tácticas (Lisandro López y Frank Fabra por Carlos Zambrano y Emmanuel Mas).
Sin público, pero con Juan Román Riquelme expectante desde la tribuna, el partido arrancó parejo, aunque el dueño de casa no tardó en generar peligro; y en una buena combinación entre Carlos Tevez y Eduardo Salvio, el “Apache” quedó mano a mano ante el arquero, pero definió a las manos. Al rato también lo tuvo Franco Solando, tras un gran pase de Carlitos, pero el delantero resolvió mal y le facilitó el trabajo al 1 del conjunto guaraní.
Por el lado de Libertad, respondió con un disparo de media distancia que Esteban Andrada resolvió con una impresionante volada. Y esto fue lo más peligroso en la primera mitad por parte de la visita, que volvió a avisar en el inicio del complemento con otra entrada aislada, y después no apareció más en las cercanías del área “xeneize”.
Boca se fue apagando con el correr de los minutos, al ritmo de la baja en el rendimiento de Tevez, que fue el mejor en la primera media hora de juego. Los ingresos de un movedizo Edwin Cardona y de Gustavo Bou, por Obando y Soldano, revitalizaron un poco al equipo, que de todos modos nunca terminó de engranar como para llevarse puesto a su rival.
De esta manera, el “Xeneize” solo generó algo de peligro a través de la pelota parada (un cabezazo de López abajo del arco que de milagro no fue gol) y de algunos disparos desde afuera del área, que no llevaron demasiado peligro al arco del uruguayo Martín Silva, a excepción del terrible bombazo de Fabra que reventó el palo y que terminó siendo la jugada más “emocionante” de un partido bastante chato.
No hubo goles en la Bombonera, pero sí objetivo cumplido: Boca se metió en los octavos de final del certamen continental. A falta de una jornada para el cierre del Grupo H de la Copa Libertadores, lidera con 11 unidades, y si el escolta Caracas no le gana este miércoles al DIM, los de Russo además se podrá asegurar el primer puesto de la zona.