Fueron 7800 kilos de diversos cortes de pollo fresco. La mercadería, que se encuentra apta para el consumo, quedó a disposición del juez de Faltas de turno, Ricardo Grossi Colombo.
La Dirección de Desarrollo Pecuario (DDP), dependiente de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Agroindustria, realizó inspecciones de rutina en un camión frigorífico e intervino parte de la carga porque estaba declarada como “congelada” pero se encontraba a temperatura de refrigeración, lo que implica una infracción.
El jueves, un camión cargado con pollo que arribó a San Juan proveniente de Entre Ríos, hizo su paso por el Punto de Control de Carnes Provincial. Durante la observación de rutina, inspectores de la DDP constataron que la mercadería que debería haber estado conservada a -18º C se encontraba a 0º.
Si bien el pollo se encontraba en buen estado de conservación, esta infracción implica la posibilidad de que se vuelva a congelar la mercadería, una práctica que está prohibida.
Se le dio la posibilidad a la empresa de que buscara una cámara para conservar la mercadería, pero no la consiguió y dada la característica de altamente perecedera de la carga, se puso a disposición del juez de faltas Ricardo Grossi Colombo.
La mercadería intervenida corresponde a 500 cajas de pechuga, patamuslo y carne de pollo mecánicamente separada (carne molida). Eso significa unos 7.800 kg de producto fresco que se encuentran aptos para el consumo inmediato.