El Gobernador de San Juan saludó a los sanjuaninos resaltando que «con la experiencia de este año, hemos aprendido a valorar lo que tenemos y a quienes nos rodean».
Es una época propicia para detenernos un instante a realizar un balance del año que termina. Reflexionar, proyectando acerca de lo que podemos hacer para mejorar en los nuevos días del 2021.
Este 2020, fue atípico y golpeó al mundo con dureza, con una pandemia que nos sorprendió a todos. Sombras e incertidumbres se abatieron sobre el mundo, atravesando geografías, culturas, ideas y religiones. Y sentimos en carne propia los temores lógicos de un riesgo nunca vivido por todos.
Porque esa es palabra: todos. El 2020 nos impuso un desafío a todos. Y entre todos debe ser la respuesta.
Me genera gran orgullo saber que los sanjuaninos nos unimos, nos escuchamos, nos cuidamos y nos acompañamos solidariamente, con una convicción que nos caracteriza, la de seguir avanzando pese a todas las adversidades.
Hoy quiero pedirles que al celebrar esta Navidad y al recibir el Año Nuevo, brindemos con el corazón por los que ya no están, que alentemos a los que están luchando por estar mejor, que acompañemos a quien está en soledad, y, sobre todo, brindemos porque sigamos permaneciendo unidos para superar este momento.
Que la cena familiar sea el motivo para el esperado encuentro, que con mucho afecto y de manera responsable nos permita volver a vernos y expresar el amor por los nuestros.
Aprovechemos esta oportunidad de estar juntos. Con la experiencia de este año, hemos aprendido a valorar lo que tenemos y a quienes nos rodean.
¡Felices fiestas sanjuaninas y sanjuaninos!.
