Mientras las conversaciones con el laboratorio Pfizer continúan empantanadas, el Gobierno nacional avanza en varios frentes para hacerse de las dosis necesarias que permitan vacunar este año a buena parte de la población argentina, en un contexto donde el rápido aumento de contagios de coronavirus apremian a las autoridades y urgen a acelerar la inmunización de la población, ante lo que parece inevitable: la segunda ola de coronavirus se daría mucho antes de lo pensado.
En este escenario, tras firmar contrato con el gobierno de Vladimir Putin por 20 millones de dosis de Sputnik V, ahora la Argentina renovó el diálogo con las autoridades rusas para intentar adosar otras 10 millones de dosis, siempre y cuando la producción del laboratorio Gamaleya así lo permita.
Por lo pronto, este sábado llegará a Ezeiza el segundo vuelo proveniente de Moscú con otras 300 mil dosis de Sputnik V, que servirán para aplicar el segundo componente de la vacuna y completar así la inmunización de los trabajadores de la salud que recibieron la primera dosis.
Por el momento, no hay otros vuelos ya confirmados con rumbo a Rusia, pero saldrán más aviones de Aerolíneas Argentinas a medida que la producción del Centro Gamelaya habilite la provisión de más dosis.
VACUNA DE OXFORD
El otro gran acuerdo que la Argentina ya lubricó es con el laboratorio AstraZeneca, quien suministrará 22,4 millones de dosis de su vacuna elaborada en alianza con la Universidad de Oxford. Se trata de la vacuna más económica de todas porque así lo dispuso la casa de altos estudios, que no pretende lucrar con la pandemia.
Estas dosis estarían disponibles en el país recién a partir de marzo, pero antes, durante febrero, llegarían al menos 3 millones de esa misma vacuna, pero por otro acuerdo que firmó el presidente Alberto Fernández. Se trata del acuerdo COVAX (mecanismo de compra colectiva impulsado por la OMS) que contempla un total de 9 millones de vacunas.
Voceros de la cartera sanitaria confirmaron a este portal que el mes próximo llegarían las primeras dosis surgidas por ese convenio, al que suscribieron 172 países. El Gobierno promulgó en noviembre la Ley de Vacunas Destinadas a Generar Inmunidad contra Covid-19 (27.573) que, según explicó González García, era una «herramienta necesaria» para avanzar en los contratos con las diferentes compañías y un requisito del Covax.
VACUNA CHINA
A su vez, el Gobierno abrió una puerta de diálogo con Sinopharma, una compañía china de la cual una de sus vacunas se encuentra realizando ensayos clínicos en la Argentina en la Fundación Huésped.
El acuerdo con la empresa estatal Sinopharm para la compra de alrededor de un millón de dosis aún está en proceso. Voceros del Ministerio de Salud de la Nación que conduce Ginés González García aclararon a minutouno.com que aún no se resolvió el número de vacunas que se adquirirán ni el valor final que deberá pagar el país por las dosis del gigante asiático.
No obstante, hace meses que el ministerio viene negociando con el laboratorio chino y se especula con que recién en marzo comenzarían a llegar las primeras dosis. Sinopharm realizó ensayos clínicos con tres mil voluntarios del país, lo que permitió que la Argentina fuera una prioridad a la hora de comenzar con su comercialización.
En este contexto, el presidente de China, Xi Jinping, aseguró que su país “está dispuesto a trabajar» con Argentina para promover la cooperación de alta calidad y para avanzar en el desarrollo de vacunas contra el coronavirus.
VACUNA PFIZER
Respecto a las negociaciones por 1,5 millones de vacunas del gigante de la industria farmacéutica Pfizer, las autoridades nacionales esperan una respuesta del laboratorio norteamericano a la propuesta que le hizo la Argentina luego de que pusieran dos trabas legales vinculadas a algunos principios que estipula la Ley de Vacunas Destinadas a Generar Inmunidad contra Covid-19 . «Les mandamos una opción de contrato y quedaron en responder. Todavía no hay novedades», señalaron voceros de Ginés.
VACUNA MODERNA
Este lunes, la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, confirmó que el Gobierno está sumando a la empresa estadounidense Moderna a su agenda de negociaciones de compra de vacunas. Moderna tiene una de las vacunas más caras. Ronda los 38 dólares por dosis, diez veces más que la de Oxford y cuatro veces más que la Sputnik V, pero ante la urgencia de inmunizar a los argentinos por el aceleramiento de la curva de contagios, el país abrió una puerta de diálogo con la firma. Y es el propio Presidente quien estará detrás de esas conversaciones.