El «Millonario» alcanzó en la punta a Unión, ambos con 13 puntos, tras derrotar 4 a 0 como local al «Lobo», con tres penales convertidos por Enzo Fernández (29m PT), Julián Álvarez (45m PT) y Juan Fernando Quintero (26m ST) y otro gol de Braian Romero (45m ST).
River Plate, con tres tantos de penal, goleó este domingo a Gimnasia La Plata por 4 a 0, en el partido correspondiente a la sexta fecha de la Copa de la Liga Profesional, y de esta manera aguardará entonado el Superclásico con Boca del próximo domingo en el Monumental.
Enzo Fernández, Julián Álvarez y Juan Fernando Quintero, todos por la vía del penal, y Braian Romero marcaron los tantos en un Monumental colmado, que celebró un nuevo triunfo y se acordó del rival de toda la vida en distintos pasajes del encuentro.
El equipo de Marcelo Gallardo alcanzó los 13 puntos y es puntero de la zona 1 junto con Unión, de Santa Fe. En tanto, Gimnasia, con 5 unidades, prolongó su mal momento futbolístico y quedó preocupado de cara al clásico con Estudiantes.
Gimnasia, sin el uruguayo Brahian Alemán por suspensión, planteó un partido parejo ante River, con las líneas defensivas y medias bien juntas para cerrar espacios.
Dos cabezazos de Cristian Tarragona fueron los intentos del «Lobo» cuando aprovechó los buenos inicios de Ramón Sosa y Tomás Muro.
En River volvió Enzo Pérez, recuperado de una lesión, para tomar ritmo de cara al Superclásico, y le costó entrar en juego. Cuando ajustó el rendimiento, Enzo Fernández, la figura de la cancha, creció en su nivel y el local buscó por el sector de Francisco Gerometta para desnivelar.
Esequiel Barco, de buen partido, inició la jugada que derivó en el primer penal para River con la mano de Muro en el área. Enzo Fernández, con un gran remate, abrió el marcador y destrabó un partido que hasta entonces era parejo.
Cuando se terminaba la primera etapa, Gimnasia estuvo cerca del empate, pero Paulo Díaz desactivó el ataque. En la jugada siguiente, Barco se escapó rumbo al gol y el arquero Rodrigo Rey lo tocó en el intento de gambeta. Julián Álvarez se hizo cargo esta vez del segundo penal de la noche.
El segundo tiempo fue todo de River. El último campeón del fútbol argentino dominó las acciones ante un rival que perdió la compostura. El orden quedó lejos en Gimnasia y River no se confió.
Gallardo dispuso el ingreso de Juan Fernando Quintero, ovacionado por ser uno de los héroes de Madrid, y el colombiano aportó el tercero, también de penal, cuando el ingresado Guillermo Enrique barrió el tobillo de Álvarez en su intento de despejar la pelota en el área.
Quintero se lució luego con un par de asistencias ante los espacios que dejó un desconcertado Gimnasia que no levantó con los cambios que ensayó Néstor Gorosito.
Y en el final, Romero tuvo su premio y se reencontró con el gol tras una serie de rebotes dentro del área chica gimnasista.
River impuso su buen funcionamiento, de menor a mayo apabulló a Gimnasia y los más de 70 mil hinchas que acudieron al Monumental lo agradecieron y pidieron por otro triunfo ante Boca: «¡El domingo, cueste lo que cueste, el domingo tenemos que ganar!».