Las distribuidoras Energía San Juan y DECSA pidieron un aumento del 130,18% que fue rechazado.
Este jueves, se cumplió la Revisión Tarifaria Extraordinaria del EPRE y se definió el cuadro de incrementos para San Juan para el primer semestre del año. Si bien comenzará a aplicarse desde el 23 de enero, los valores se verán reflejados en las facturas de abril. Para los usuarios residenciales se optó por mostrar los aumentos definidos en pesos y así, el esquema partiría de los $4000 más en la factura.
«En cumplimiento de la Ley de Marco Regulador vigente (…) se aprobaron valores tarifarios máximos para consumos de electricidad desde el 23 de enero de 2024 al 22 de julio de 2024, es decir facturas con vencimientos desde abril a septiembre de 2024. La Audiencia Pública tuvo en antecedente las elevadas variaciones de costos experimentadas en el segundo semestre de 2023, y las proyecciones disponibles para el primer semestre de 2024″, explicaron desde EPRE.
Se analizó, además, la adopción de medidas de resguardo y protección de los intereses de las personas usuarias, incluyendo mecanismos de contención de los niveles tarifarios. Se hará mediante la adopción de un sendero de variación con incrementos escalonados en cada mes del semestre, en reemplazo de un único incremento semestral de aplicación inmediata».
Además, se fundamentó el rechazo de la pretensión de incrementos tarifarios del 130,18 % solicitados por las distribuidoras Energía San Juan y DECSA. Se tomaron en cuenta los estudios técnicos presentados por especialistas del EPRE y el incremento para residenciales ronda el 85,79%.
La extensa audiencia, que comenzó puntual a las 9 hs. y finalizó sobre las 14 hs., tuvo un minucioso análisis técnico por parte de las distribuidoras y EPRE e incluyó la participación de miembros del Consejo, diputados y se leyó un escrito de la defensora del Pueblo, entre otros.
«Se consideró en la Audiencia Pública, la variación verificada y proyectada de los costos de la prestación, la adopción de medidas de contención en un sendero de evolución tarifaria (un aspecto en el que se hizo especial hincapié) y el incremento de los unitarios para el cálculo de sanciones a las Distribuidoras por incumplimientos», marcó un informe de EPRE.
La propuesta de sendero de evolución tarifaria «pretende morigerar el impacto de la conformación a costos de las tarifas eléctricas, siguiendo criterios de gradualidad y conmensurabilidad con los ingresos económicas de las personas usuarias, especialmente hogares».
También se puntualizó que «en caso de advertirse desviaciones significativas en las previsiones de variación de costos estimadas para el primer semestre de 2024, o instrumentarse medidas económicas a nivel nacional que impliquen la variación de los presupuestos adoptados, deberán reformularse las variaciones del sendero tarifario, ajustando los valores en más o en menos, para conformar las tarifas a costos en su exacta incidencia».