Mauricio Macri está logrando concretar lo que pocos consideran posible: volver para atrás la rueda de la historia social argentina. En todos o casi todos los aspectos de la vida económica y social, los argentinos estamos retrocediendo gracias a las políticas implementadas por la gestión que encabeza el presidente de la Nación.
Miles de despidos en la administración pública y en la actividad privada como no se veían desde los 90; una inflación galopante como no se recuerda desde la hiper alfonsinista; tarifazos constantes y sistemáticos; caída del poder adquisitivo…
Por ejemplo, en lo que respecta al Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVyM), que ya está en los mismos niveles de 2007 con relación al dólar; es decir que se han perdido más de una década de progresos en este sentido.
Teniendo en cuenta que el SMVyM está en alrededor de 10.000 pesos, tras la escalada del dólar oficial representa ahora unos 330 dólares; en 2007, el Consejo del Salario fijaba el sueldo mínimo en $ 980, unos 310 billetes de la divisa norteamericana.
Desde 2004 a 2015, el salario mínimo medido en dólares tuvo un aumento ininterrumpido (con excepción de 2014): al inicio del gobierno de Néstor Kirchner era de 149 dólares para llegar al final del kirchnerismo a 607 dólares.