El presidente de los Estados Unidos fue el único mandatario que no quiso participar de la reunión a solas de los líderes mundiales y dejó al desnudo las tensiones entre ellos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, marcó este viernes el pulso de la primera jornada de debate de la Cumbre de Líderes del G20, en la que quedaron al
desnudo las «tensiones» internas, mientas el anfitrión, Mauricio Macri, insistió en que «dialogar y dialogar es la forma de empujar los límites de lo posible».
Tras lanzar una provocadora frase contra China que incomodó a la Casa Rosada, Trump fue el único mandatario que no quiso participar de la reunión a solas
de los líderes internacionales en el llamado «retiro» en el predio de Costa Salguero y recién se incorporó a la sesión plenaria en el salón principal de la cumbre.
«Dialogar y dialogar es la forma de empujar los límites de lo posible», dijo el presidente Macri al inaugurar el foro que reúne a los líderes de las 20 países más potentes y emergentes del planeta, que llegaron a Buenos Aires para debatir sobre los principales asuntos de la agenda global.
Fueron dos tandas de debate en la que los mandatarios y representantes de organismos internacionales discutieron en torno a una agenda de temas preacordada, aunque aún no había consenso en las definiciones sobre temas comerciales (algunos líderes defienden el multilateralismo, mientras otros buscan el proteccionismo) y también climáticos, que serán plasmadas en un documento final.
«Hay un muy buen avance en materias delicadas relativas al comercio, se sigue trabajando en el clima. Estamos trabajando todavía en la redacción», sostuvo el canciller Jorge Faurie ante los periodistas en Parque Norte, donde se montó el centro de prensa oficial./NA