La entidad indicó que el pago, por un total de 5.900 millones de dólares, se realizó «con total normalidad, en tiempo y forma y garantizando certidumbre en el marco de la actual estabilidad financiera y cambiaria».
El BCRA giró los fondos a las entidades custodias de los bonos, las que a la vez distribuyeron los recursos entre sus clientes.
En el caso de los clientes del exterior, se retransfirieron los fondos a las custodias internacionales donde se encontraban depositados los valores, los cuales a su vez los redistribuyeron entre los tenedores de los bonos.