El Gobierno consiguió que el FMI respalde la venta de reservas para controlar al tipo de cambio. La intervención no tendrá tope y podrá realizarla aún cuando la cotización esté por debajo de los $51, el techo de no intervención. Con esta medida, Mauricio Macri financiará la creciente fuga de capitales.
El Banco Central resolvió este lunes modificar una vez más el programa monetario lanzado en octubre pasado y eliminó de hecho la zona de no intervención cambiaria. En otras palabras, podrá vender dólares de las reservas a quienes se lo demanden antes de que la divisa llegue a valer 51 pesos.
La decisión del Comité de Política Monetaria del BCRA fue respaldada por el Fondo Monetario: «El Banco Central de Argentina introdujo hoy importantes medidas para abordar la reciente volatilidad del mercado financiero y del tipo de cambio. Apoyamos estas medidas, que están adecuadamente calibradas para los desafíos que enfrenta la Argentina», sostuvo Gerry Rice, vocero del FMI, a través de su cuenta de Twitter.