Los sanjuaninos recorrieron la ciudad que vivió de cerca la guerra y recuerda en casi todas sus esquinas a los excombatientes y el valor de Malvinas para los argentinos.
Transitar Río Gallegos es recordar a cada paso la historia y el dolor de Malvinas, museos, monumentos, lugares históricos, hacen que quienes fueron parte de la gesta hayan comenzado este viaje con emociones fuertes.
Este viaje, único en el país, se realiza por disposición del Gobierno de San Juan, mediante el decreto N° 288 firmado por el gobernador Sergio Uñac y por el cual todos los veteranos sanjuaninos tienen la posibilidad de regresar a las islas Malvinas, al igual que pueden hacerlo los familiares de caídos.
A primera hora de la mañana los veteranos visitaron el Museo de la Prefectura Naval Argentina, que cuenta con indumentaria, galería de cuadros, replica a escala de las embarcaciones utilizadas, material bibliográfico histórico, etc.
Luego se dirigieron al Museo Marítimo y Naval de la Patagonia Austral; en el lugar diversos veteranos que estuvieron en el Crucero General Belgrano pudieron contar sus experiencias al igual que Alicia Salas, hermana de Jorge Luis Salas, que falleció el 2 de mayo en el crucero.
En tercer lugar, visitaron el Monumento a los caídos en el Conflicto del Atlántico Sur de la Fuerza Aérea Argentina (FAA). Está ubicado en la Costanera de la ciudad de Río Gallegos, en el lugar hay dos monumentos: un avión Mirage M 5 Mara y el de un piloto argentino, ambos miran hacia las Malvinas.
Debajo del avión Mirage se encuentran las placas con los nombres de todos los soldados argentinos de la Fuerza Aérea que perdieron la vida y que formaban parte de esa fuerza durante la gesta de Malvinas.
El monumento del piloto fue realizado por la Comisión de homenaje a los pilotos de la Fuerza Aérea Argentina muertos en acción, se pudo construir con el aporte de la comunidad de Río Gallegos.
Fue inaugurado el 19 de diciembre de 1983, y es el primer monumento construido en el país en homenaje a los pilotos de la Fuerza. Esta obra fue realizada por encargo de la comisión al profesor Francisco Bello Hernández, escultor y poeta español.
Las dos alas simbolizan el vuelo de los pilotos con sus aviones A4B. El pie derecho del piloto está apoyado en las alas dando sentido de firmeza a sus convicciones. El piloto mira al frente de los visitantes. Su mano izquierda está apoyada sobre el corazón, significando: «Nosotros dimos todo, hasta nuestras vidas, no se olviden».
El brazo derecho extendido apunta hacia las Islas Malvinas diciendo «Allí estamos». El casco de vuelo está depositado en el suelo, simbolizando a todos los héroes caídos en la guerra de Malvinas.
La siguiente parada fue en la Zona Naval de la Armada Argentina de Santa Cruz en el Monumento a los Caídos del Crucero General Belgrano. El mismo dice «honor a los 323 héroes del Crucero ARA General Belgrano – 2 de mayo de 1982».
La mañana finalizó en el salón Cultural de la Sede de los Excombatientes de Río Gallegos, con la obra de teatro «Silencio Ficticio» de Julio Cardozo con la actuación de Andrés Fernández. Andrés es excombatiente de la provincia de Santa Cruz.
Según palabras de Andrés Fernández, quien personifica a Guillermo Soto en la obra dice: «Es una mezcla de las vivencias de mi niñez, de mi experiencia en la guerra, de las distintas miradas que surgen en el tránsito por la vida, y de los recuerdos que elegí conservar, hago esto para malvinizar”.
La obra cuenta con el apoyo del Instituto Nacional del Teatro, del Fondo Nacional de las Artes, del Teatro Colón y el Gobierno de Santa Cruz.