Visitar el cementerio argentino de Darwin para rendir honor a todos los soldados, fue el momento más duro para el contingente de sanjuaninos que se encuentran en Malvinas desde el sábado.
Nublado, frío, con viento fue el clima que los sanjuaninos tuvieron al llegar al cementerio argentino de Darwin. Los quince veteranos y la hermana de un caído, rindieron homenaje a quienes dieron su vida por la patria.
Para cada uno de ellos fue un día que no olvidaran nunca en las Malvinas, un acontecimiento doloroso, que sin embargo sirvió para cerrar heridas después de 38 años.
El Darwin es un cementerio militar de combatientes de Argentina que murieron en la guerra en 1982. Se encuentra a dos kilómetros del Puerto Darwin y a 88 kilómetros de Stanley.
La delegación sanjuanina llevó rosarios de distintas fundaciones para dejar en cada una de las tumbas que fueron confeccionados por las instituciones sanjuaninas: Asal, Fundame, Fundación Poli Poli, Casa Sahni y Fundación San Marcos.
En silencio y con profunda emoción en sus rostros, cada uno de los excombatientes camino con la cabeza baja buscando la tumba de sus excompañeros y seres queridos que fallecieron defendiendo el suelo argentino con honor y coraje durante el conflicto bélico en Islas Malvinas contra Inglaterra en 1982. En cada una cruz dejaron un rosario.
Alicia Salas, cuyo hermano falleció en el Crucero General Belgrano el 2 de mayo del 1982, estuvo acompañada por los veteranos a la hora de rendirle homenaje a su hermano. Ella es el único familiar de un caído en Malvinas de todo el contingente.
Junto al nombre de Jorge Luis Salas se encuentran grabados en piedra los 649 argentinos que murieron en el conflicto. Solo 237 de ellos fueron enterrados en este cementerio, de los cuales menos de diez se encuentran sin identificar con la inscripción “Soldado argentino solo conocido por Dios”.
El cementerio está dentro de una pequeña hondonada, rodeada de cerros y cursos de agua intermitentes. El costado de Darwin Road hay un pequeño cartel que indica “Argentine Cemetery”. El monumento fue inaugurado en octubre de 2009 y es mantenido por familiares de caídos. En el centro tiene una gran cruz blanca, y a la izquierda una imagen de la santa patrona de Argentina, la Virgen de Luján. La imagen de la Virgen de Luján recorrió todas las provincias argentinas antes de llegar a la isla.
