El ministro de Justicia y Seguridad Pública de Brasil, el exjuez Sérgio Moro, presentó este viernes su dimisión, después de tensiones con el presidente Jair Bolsonaro por cambios en la cúpula de la Policía Federal.
«Yo tengo el deber de intentar proteger la institución, la Policía Federal. Busqué una solución alternativa para evitar una crisis política durante la pandemia, pero entendí que no podía dejar de lado mi compromiso con el Estado de Derecho. Este último acto es la señal de que el presidente me quiere fuera del cargo», aseguró en una comparecencia pública la mañana de este viernes.
Horas antes, el Gobierno anunció la destitución del director general de la Policía Federal, Mauricio Valeixo, un hombre de confianza del ministro Moro, que él mismo había puesto en el puesto. Moro dijo que se enteró de su destitución de madrugada y a través del Diario Oficial de la Unión.
La Policía Federal, que se encarga de las investigaciones anticorrupción, está bajo el mando del ministerio de Moro, pero Bolsonaro interfirió para nombrar a otro director, algo que el ministro no consideró aceptable.
El exjuez coordinó durante años la Operación Lava Jato, lo que le dio gran notoriedad a nivel nacional y le convirtió para muchos en un símbolo anticorrupción, pero también le valió fuertes críticas tras supuestas irregularidades en el proceso.
Meses después de la condena a Lula, que lo dejó fuera la carrera presidencial en 2018 para la que partía como favorito, Moro se unió a la administración de Bolsonaro, lo que mucho entendieron como una especie de «recompensa» a su trabajo.