A 35 años del comienzo de la Guerra de Malvinas y a cuatro de que el Gobierno iniciara formalmente el pedido a la Cruz Roja Internacional, el proceso para identificar los cuerpos enterrados como NN de los 123 caídos en el conflicto bélico tomó en los últimos meses impulso y actualmente se encuentra en la etapa de toma de muestras de ADN de familiares para luego poder cotejar con los restos que se encuentran en el Cementerio de Darwin.
De las 237 tumbas que hay en el frío y desolado cementerio, que en 2009 fue declarado Lugar Histórico Nacional, más de la mitad pertenecen a combatientes que cayeron en los 73 días que duraron las acciones militares y cuyos restos no están identificados.
«Soldado argentino sólo conocido por Dios», rezan 123 placas de mármol negro en el Cementerio de Darwin, ubicado 80 kilómetros al sudoeste de Puerto Argentino en la Isla Soledad.
La iniciativa para identificar a los caídos comenzó en 2008 con el veterano Julio Aro, que junto con la exdirectora de la Revista Gente Gabriela Cociffi, logró que el tema llegara al líder de Pink Floyd, Roger Waters.