El «millonario» logró quedarse con el clásico en el Bajo Flores. Armani le contuvo un penal a «Uvita» Fernández. San Lorenzo se hunde.
River supo capitalizar al máximo las ocasiones que tuvo y derrotó hoy a San Lorenzo por 1 a 0, para alcanzar a Unión de Santa Fe en la punta de la tabla de posiciones de la Zona A de la Copa de la Liga Profesional.
El conjunto «millonario» se impuso con el gol convertido por el chileno Paulo Díaz, a los 36 minutos del primer tiempo, aunque el «ciclón» podría haberse puesto en ventaja antes, dado que a los 32 de la misma mitad el arquero Franco Armani le atajó un penal a Nicolás «Uvita» Fernández.
Con este resultado River alcanzó a Unión de Santa Fe en la punta de la tabla de posiciones de la Zona A, con 10 puntos, mientras que el azulgrana queda penúltimo con 2 unidades, junto a Talleres de Córdoba y solo a uno del colista Patronato de Paraná.
En la próxima jornada el equipo de Marcelo Gallardo será local frente a Gimnasia y Esgrima La Plata y el «ciclón» será visitante de Talleres de Córdoba.
El conjunto de Gallardo tuvo en Enzo Fernández al térmometro del equipo, ya que todo el juego pasó por sus pies y Esequiel Barco terminó siendo el principal artífice de los ataques «millonarios».
River debió implementar un «Plan B» en ataque, dado que en la entrada en calor sufrió la baja de Julián Alvarez, y su reemplazante Braian Romero tuvo dos claras ocasiones de gol, primero con un remate en el poste y luego con una salvada de Torrico, ante un cabezazo.
Sin embargo, pese a que la visita tuvo mejores intenciones y opciones, fue San Lorenzo el que tuvo la màs clara, cuando a los 32 «Uvita» Fernández pateó un penal y Armani se lo sacó con los pies.
Pero encima de males a San Lorenzo se le complicó la tarde cuando minutos más tarde, un córner de Barco quedó en la cabeza de Paulo Díaz, quien abrió el marcador.
La ventaja le dio algo de tranquilidada a los de Gallardo, mientras que Pedro Troglio se desesperó para poder ordenar a su equipo, ya que Ricardo Centurión nunca pudo ser el artìfice de juego.
Con más ganas que juego el «ciclón» intentó emparejar las acciones, pero por más cambios ofensivos que implementó Troglio, el equipo siguió con la misma postura de pisar poco el área rival.
A su vez, River quiso y tuvo alguna otra chance, no tan clara como en el primer tiempo, pero manejó el control del juego y si no hubo más goles fue por la capacidad de Torrico bajo los tres palos.