El estado de San Pablo se encuentra en estado de alerta luego de que 680 milímetros de lluvias cayeran en algunas de sus localidades, el mayor acumulado caído de manera ininterrumpida en la historia del país.
Socorristas continuaban con la búsqueda de sobrevivientes en el litoral de San Pablo, donde lluvias torrenciales dejaron el fin de semana al menos 44 personas muertas y decenas de desaparecidas, además de numerosos heridos, muchos de ellos de gravedad.
Según informaron las autoridades locales, más de 680 milímetros de lluvias cayeron en 24 horas en San Sebastián, un destino playero ubicado a unos 200 kilómetros de la ciudad de San Pablo (sureste). Es el mayor acumulado caído de manera ininterrumpida en la historia de Brasil, según el gobierno del estado.
A media mañana de este martes, la gobernación elevó el balance de muertos a 43 en San Sebastián y uno en la localidad de Ubatuba. También informaron de más de 1.730 personas desalojadas, y otras 766 sin hogar en todo el estado de San Pablo.
«Los trabajos de búsqueda y salvamento siguen de manera interrumpida en la región», donde los deslizamientos de tierra provocados por las precipitaciones crearon ríos de lodo, piedras y árboles que arrasaron con precarias casas construidas en las laderas, señalaron las autoridades.
Con las rutas aún bloqueadas por los deslaves, algunos temporadistas fueron evacuados en barco, mientras continuaba un tráfico intenso de helicópteros que iban y volvían de las zonas más afectadas.
Y el panorama no apunta a mejorar, ya que se prevé que las precipitaciones continuarán en la región